Mód 2: Lectura introductoria

En este segundo módulo vamos a abordar la cuestión política en Latinoamérica. El objetivo será aproximarnos a la realidad ideológica de diferentes países y comprender los desafíos a los que los dirigentes políticos deben hacer frente en distintas áreas sociales y económicas.

En la actualidad, la democracia es el sistema político imperante en la mayoría de los gobiernos de los países latinoamericanos. Sin embargo, conseguir esta estabilidad democrática no ha sido tarea fácil pues, como es bien sabido, el siglo XX estuvo plagado de dictaduras, revoluciones, contrarrevoluciones y demás turbulencias políticas. La democracia, junto con la división de poderes que la caracteriza, se ha ido implantando en el continente y son pocos los gobiernos en los que aún planea la sombra de regímenes autoritarios. En concreto, se puede hablar de tres casos o países.

El caso de Cuba es quizá el más conocido. Fidel Castro, líder de la revolución que acabó con el régimen dictatorial de Batista, gobernó la isla durante 50 años. Desde su muerte, en el 2016, se espera que se produzca una democratización real pero no ha habido grandes avances en los últimos años que indiquen un cambio inminente de sistema o que una apertura mayor del régimen se vaya a producir. Recordemos que el único partido existente es el comunista y que de sus filas salen todos los representantes políticos. Otro caso particular es el de Venezuela. El presidente actual, Nicolás Maduro, ha tenido como misión continuar con el legado político de Hugo Chávez, fallecido en el 2013, y aunque se hayan celebrado elecciones a las que se han presentado diferentes candidatos, sobre el proceso siempre ha planeado la sombra del fraude electoral, y hoy día, aún teniendo en contra a gran parte de la comunidad internacional, Maduro consigue mantenerse en el poder. Nicaragua representa el tercer ejemplo de régimen autoritario. Su actual presidente, Daniel Ortega, antiguo combatiente revolucionario sandinista y que ostenta el poder desde el 2007, ha convocado elecciones en varias ocasiones y siempre las ha ganado con un amplio apoyo popular. No obstante, este apoyo viene precedido de la detención de los líderes de la oposición, de un severo control de los medios de comunicación y de los distintos órganos institucionales, algunos tan importantes como el judicial. Las acusaciones de abuso de poder del gobierno de Ortega son constantes por parte de la oposición y de los numerosos exiliados

Aunque estos tres casos de regímenes autoritarios son llamativos y constantemente se encuentran noticias relacionadas con ellos en la prensa, se deben considerar como excepciones en el amplio mapa democrático hispanoamericano.  

De hecho, la región puede mostrar con satisfacción ya varias décadas de gobiernos democráticos. Se debe tener en cuenta que, desde un punto de vista histórico, las democracias actuales latinoamericanas son recientes ya que se inician a partir de 1978 y que esta falta de arraigo conlleva ciertamente una serie de desafíos y ajustes que solo el paso del tiempo y el afianzamiento de las instituciones democráticas ayudarán a resolver. Por otro lado, numerosos países del continente se enfrentan a una crisis social que conlleva grandes desigualdades económicas, y donde el papel de las instituciones, especialmente el del poder judicial, se ha ido deteriorando en favor de un aumento del populismo y la insatisfacción ciudadana. De todas formas, estos fenómenos no son exclusivos de Latinoamérica y se podría argüir que son extrapolables a una tendencia global.

En cualquier caso, el continente sigue en proceso de consolidación del sistema democrático. Ahora bien, cada ciclo electoral trae movimientos hacia la derecha o la izquierda.  Si se tiene en cuenta el actual mapa ideológico, ¿se podría determinar de una forma precisa y clara la ideología del continente latinoamericano? La respuesta sería que, aunque la derecha está en retroceso debido a los resultados de las elecciones que varios países celebraron en el 2021 y que dieron el triunfo a la izquierda, existe en cierta manera un equilibrio entre las ideologías; por ejemplo, encontramos partidos de derecha o centro-derecha gobernando en República Dominicana, Puerto Rico, Guatemala, Panamá, Costa Rica, Paraguay y Uruguay. En el resto de los países gobiernan partidos de izquierda. Ecuador, Chile, Honduras y Colombia son algunos en los que ha habido recientemente elecciones y en los que la izquierda política se ha alzado con el poder. Es especialmente llamativo el caso de Chile en el que tras una protesta social masiva denominada “el Estallido Social”, un líder activista, Gabriel Boric, se ha convertido en el presidente más joven de la historia latinoamericana y se enfrenta a grandes retos para dar respuesta a las demandas sociales de su país. En Honduras el triunfo de la izquierda se ha materializado en la figura de Xiomara Castro, cuyo partido político, Libertad y Refundación, es una coalición de partidos de izquierdas. Xiomara es la única mujer hoy en día que ocupa el cargo de presidente en el continente americano y es la primera mujer presidenta en Honduras. No se puede negar que la presencia de los hombres en altos cargos políticos es predominante, pero se debe notar que a lo largo de los últimos 50 años varios países han contado con mujeres presidentas. Este es el caso de Violeta Chamorro, que fue presidenta en Nicaragua en la década de los noventa, Michelle Bachelet, que ha sido presidenta en dos legislaturas en Chile, o Cristina Fernández de Kirchner que gobernó en Argentina desde el 2007 al 2015 y que en la actualidad es vicepresidenta del gobierno. El camino para alcanzar la paridad de género en cuanto a la representación en el ámbito político es todavía largo y se deben seguir dando pasos para que la mujer ocupe más puestos de poder. En este sentido, el último gobierno de Chile se presenta como modélico ya que la mayoría de su gabinete de ministros son mujeres lo cual claramente, supone un triunfo del movimiento feminista.

Pero la incorporación de la mujer en las altas esferas gubernamentales no es el único reto; la participación en la toma de decisiones por parte de las comunidades indígenas y de otras minorías también debe tener un espacio prioritario en la política de estos países. ¿Se te ocurren otros retos que deba enfrentar la política en Latinoamérica? ¿Qué características deben tener los representantes políticos? ¿En qué puntos se deben centrar los programas electorales? ¿Qué es esencial o necesario para que una democracia funcione? ¿Cómo podríamos mejorarla?


Para explorar más sobre el tema puedes consultar las siguientes fuentes: 

http://www.bnm.me.gov.ar/giga1/documentos/EL002327.pdf

https://www2.ohchr.org/spanish/issues/democracy/costarica/docs/pnud-seminario.pdf

https://elpais.com/internacional/2022-01-20/la-democracia-en-america-latina-esta-en-riesgo.html

https://www.realinstitutoelcano.org/analisis/la-crisis-de-la-democracia-en-america-latina-2019-2021/